domingo, 22 de diciembre de 2013

Policía ...profesión que mantiene la seguridad del pueblo o de la casta política?

Se suponía que la policía era una profesión que estaba para mantener la seguridad del pueblo.  Una vez más se  quedan en evidencia delante de las cámaras. No digo que todo lo que hagan sea solo esto, pero si yo fuera uno de los policías que sale en el vídeo... me replantearía mi profesión. 
No puedo evitar irritarme, enrabiarme y que mi corazón chille por dentro de manera que no se escuche toda la impotencia que siento cuando veo esta clase de vídeos. 
Son cientos de días los que he ido a manifestaciones, "para variar" podría decir que el 75% de ellas han sido con la derecha al frente del gobierno. Muchas han acabado bien pero otras han seguido con altercados de la policía, en ocasiones con acciones como esta pero que yo no he podido ver con mis ojos. Pero os aseguro que la impotencia que se siente cuando son tus propios ojos los que ven la manera en la que tratan a los manifestantes  y sin que hayan hecho absolutamente nada malo, es muy mala. Te hierve la sangre, y por un momento dejas de pensar que si no paras de gritar, la siguiente puedes ser tú. La imposibilidad de hacer algo por esa persona que están arrestando, la empatía que sientes por la situación injustificable que estás viviendo y la rabia contenida por ver que un policía actúa como un toro embolado creyendo que la causa de sus problemas son los manifestantes, hacen que cada día pierda más el respeto a esta profesión. 
Y sí, tengo amigos y conocidos que son policías, los hay de todas las maneras, de los que creen en su profesión pero desgraciadamente también de los que abusan de su poder. Me gustaría que los empáticos en estás situaciones fueran ellos, que pensaran un poco en porqué los manifestantes están ahí. Seguro que los policías del vídeo tienen hermanas, hijas, sobrinas, amigas... que en alguna ocasión puedan necesitar hacer uso del aborto. Ya tenemos bastante con que nos privaticen de tantos derechos como para que ahora nos tengamos que callar y agachar la cabeza como borregos que siguen a su pastor. Una vez más se ha demostrado que aun queda mucho por luchar para conseguir que las mujeres dejen de ser un grupo vulnerable y que toca progresar demasiado (y no retroceder) para no seguir perdiendo los derechos que deberíamos tener como mujeres. 



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